Tavernes de la Valldigna (Valencia), 20 de noviembre. En la tercera jornada de la División de Honor B, los Rangers sumaron su segunda victoria de la temporada ante el C.D.M. Elche (53-32). Por una vez, el escenario del partido no fue el pabellón de la Malvarrosa, como de costumbre, sino el de la ciudad de marras, el Tavernum Arena, por deseo expreso de su alcalde y acuerdo con la directiva del club. Con éste son ya cuatro los triunfos sucesivos de los de Adrián Rodríguez sobre los ilicitanos: dos en la fase regular de la liga 2009-2010, uno en las posteriores eliminatorias de ascenso a División B y, ahora, el que nos ocupa.

El Tavernum Arena.

Si tuviéramos que subrayar un denominador común de los enfrentamientos entre estos equipos, los únicos de la Comunidad Valenciana, ése sería la competitividad. Una competitividad reflejada en cifras parejas en el electrónico. De ahí que el resultado definitivo de este encuentro sorprendiera a propios y extraños. Pero es que jamás el C.D.M. Elche presentó un juego tan endeble como el que se vio el sábado. Los márgenes de victoria de un equipo sobre el otro, o del otro sobre el uno, nunca habían superado los dos dígitos. Es lógico, pues, que uno de 21 puntos rozara la utopía, cuanto menos. Pero en esta ocasión la utopía se vistió de realidad.




No obstante, en modo alguno puede decirse que los Rangers llevaran las riendas del partido desde sus primeros compases. Cuatro pérdidas de balón en otros tantos minutos, amén de numerosos tiros errados en ataque, erosionaban la valía del excelente trabajo defensivo de sus pívots, Roberto “Lucky Luck, el más rápido del Oeste” y “Ametralladora” Xavi. Así, el primer periodo concluyó con un 9-6 que pasó a un 20-15 en el ecuador del partido. Cinco arriba, pero todavía sin ninguna garantía de victoria.

El juego de los Rangers mejoró ostensiblemente a partir del tercer cuarto. Con una circulación del balón mucho más fluida y una utilización del espacio más organizada, la diferencia en el marcador comenzó a tomar cuerpo, al tiempo que el C.D.M. Elche seguía errando tanto bajo los aros como desde la media distancia. Únicamente arañaba puntos desde la línea de tiros libres, como consecuencia de haber forzado la quinta personal de equipo de los Rangers a cinco minutos de finalizar el periodo. A 4:28, Toni “Reverendo Johnson” anotó sus primeros puntos con la camiseta ranger con una entrada a canasta por el lado izquierdo. 36-27 a las puertas del último cuarto.


Michael "M.A.", "Ivanovic, la conexión croata" y Fran "Superagente 86", a punto de volver a la cancha.

Los últimos diez minutos de juego afianzaron, ahora ya sí, el dominio de los de Adrián Rodríguez en la cancha. Mientras éstos se acomodaban, los ilicitanos parecían haber tirado ya la toalla. No en vano, el parcial del cuarto fue de 15-5. Con ”Ametralladora” Xavi como máximo anotador del choque con 28 puntos. Por tanto, en último término, como apuntábamos en el primer párrafo, 53-32. Triunfo que sitúa a los Rangers a mitad de la tabla con un balance de 2-1.

Dicho esto, pasamos página para tratar un asunto de suma seriedad. Desgraciadamente, el baloncesto en silla de ruedas español se vistió de luto apenas 24 horas después de este partido: Tomás Santana, verdadero mito e institución del baloncesto adaptado en España, fallecía a los 72 años víctima de una enfermedad. Tras quedar parapléjico en un accidente de tráfico en 1967, inició su carrera como jugador en 1969 en el equipo de la residencia Francisco Franco de Barcelona, en el que militó hasta 1974 y con el que ganó en 1973 el primer campeonato de España. Y lo hizo en Elche, ciudad que le vería transitar desde entonces hasta el fin de sus días: fundó el que sería el club de su vida, el Club Deportivo Minusválidos Elche. Se enfundó la camiseta nacional en 67 ocasiones, como capitán del equipo, además, y participó en los Juegos Paraolímpicos de Alemania (1972) y Canadá (1974), en varios campeonatos de Europa y en la Copa del Mundo de Florida. En 2000 abandonó la práctica deportiva para dedicarse en exclusiva a entrenar en Elche. Incluso fue el entrenador de la selección nacional entre 2004 y 2006. A lo largo de su dilatada trayectoria, Tomás fue también un colaborador habitual del Comité Técnico Arbitral de la Federación de Baloncesto de la Comunidad Valenciana. Ante estas credenciales, uno no puede sino quitarse el sombrero.


Tomás Santana en su época de jugador.

Al mando del banquillo del C.D.M. Elche.

En otro contexto, el 53-32 habría sido un resultado de cariz histórico. Pero en éste... sencillamente ya no tiene la menor importancia. Gracias, Tomás, por tu inmensa aportación al deporte de la silla y la canasta. Donde quiera que ahora estés, sabemos que seguirás teniendo siempre un balón de baloncesto en tus manos. Y ni que decir tiene que nadie te olvidará jamás. D.E.P.



Alejandro Asensi
C.B. Rangers (Valencia)