El conjunto oscense se reconcilia con su propia historia de la mano de una plantilla que lucha día a día para cumplir con los valores de un equipo que llegara a lo más alto a base de trabajo y sacrificio. Con Quim Costa a los mandos del banquillo, el Peñas Huesca lucha por hacerse de nuevo hueco en un baloncesto al que maravillara en la década de los 90 y al que cita de nuevo sobre la cancha del Palacio de los Deportes.

“Luchador cada momento con orgullo y con valor adquiriendo con su esfuerzo el sello de campeón”. Con estas palabras recibe el himno del CB Peñas Huesca cada verano a las diferentes plantillas que han dado forma a la historia del club durante casi 4 décadas. Un espíritu guerrero y luchador adquirido a base de trabajo y que ayuda a comprender cómo una pequeña ciudad de apenas 52.000 habitantes ha podido plantar cara a los grandes proyectos del baloncesto nacional a lo largo de los últimos 37 años.

Así podría resumirse la prolija historia de un club que llegó a tutear a los grandes conjuntos de la ACB durante un total de 12 temporadas y que llevara a vestir su camiseta a auténticas leyendas como Lucio Angulo, Bryan Sallier, Sasa Radunovic, Dyron Nix o la inolvidable dupla norteamericana formada por Brian Jackson y Granger Hall. No menos conocidos serían los inquilinos de un banquillo en el que se sentaran los Arturo Ortega, Ángel Navarro, Andreu Casadevall o un Quim Costa que estampa ahora su sello en una plantilla muy diferente a las de por aquel entonces pero con una seña de identidad común, sus valores sobre la cancha.


De Granger Hall a Pierre Oriola:

Nada más y nada menos que 18 años han transcurrido desde que la afición del Peñas Huesca viera por primera vez a Granger Hall vestir la camiseta del club. Una mayoría de edad en la que mucho han cambiado las cosas por la capital oscense y en la que la junta directiva ha tenido que adaptar su proyecto a los nuevos tiempos y a un marco económico que dista mucho del que pudiera vivirse a finales de los 80. “La Magia” exhibida sobre la pista por una plantilla construida en tiempos de bonanza económica supone el mejor recuerdo para una afición que, al igual que su club, se ha adaptado a los nuevos tiempos aportando desde las gradas su granito de arena para tratar de reflotar un proyecto que ha ido de menos a más en la última década.

Si lejano queda ya el paso de Huesca por la ACB, no menos quedará su travesía por una Liga EBA en la que buscarían de nuevo sus señas de identidad hasta alcanzar en 2010 una Adecco Oro desde la que sueñan de nuevo cada noche de viernes. El trabajo comenzado por Ángel Navarro encontraría su continuidad en todo un histórico como Quim Costa acostumbrado a pelear en los momentos álgidos de su carrera con las principales estrellas de nuestro baloncesto. El técnico catalán ha sabido contrarrestar lo ajustado del presupuesto con una gran visión del mercado así como con un planning de trabajo que lleva a cada jugador a mostrar lo mejor de sí sobre la cancha.

De este modo, apellidos como Costa, Vicedo, Gatell u Oriola entregan cada día el 200% sobre la cancha para ganarse un hueco en el baloncesto español. Unos objetivos con ciertas similitudes con los de la década de los 80 y que tienen como único objetivo el hacer sonar de nuevo con fuerza a un Peñas Huesca que se ha convertido, por méritos propios en uno de esos equipos guerreros y luchadores en la actual Adecco Oro. Un trabajo que ha dado sus frutos con la permanencia virtual en la categoría y que camina con fuerza hacia su segundo playoff de ascenso consecutivo, eso sí, sin dejar de contar con al menos un oscense en sus filas ya que, Jorge Lafuente no podría faltar en el proyecto del Peñas Huesca.


Jorge Lafuente: “La clave está en entrenar a todas horas”

Con apenas 22 años, Jorge Lafuente ejerce como capitán de un vestuario que es ya como la prolongación de su hogar. Tras 8 años vistiendo la camiseta del Peñas, el único oscense de la plantilla ejerce cada verano como anfitrión de un grupo al que trata de empapar con los valores del baloncesto que mamara desde niño.

La posibilidad de sentirse un privilegiado a la hora de ejercer como abanderado del equipo de su ciudad entrega a Lafuente una responsabilidad que se pone de manifiesto en sus palabras. Sólo de este modo puede entenderse la madurez de un jugador que tiene claras cuáles son las claves del éxito de este Peñas Huesca:

“Los comienzos de temporada siempre son difíciles ya que normalmente existe una gran incertidumbre acerca del rendimiento que se puede obtener del equipo, especialmente en grupos con bajo presupuesto y que deben apostar por gente joven como es nuestro caso y en el que no se sabe a ciencia cierta cuáles pueden ser los objetivos o cómo se desarrollará la temporada.

Pero este año, el club decidió dar continuidad a un importante grupo de jugadores respecto a la temporada pasada, muchos nos conocíamos ya del año pasado y, lo más importante, teníamos de antemano una confianza ciega tanto en Quim Costa como en su cuerpo técnico lo que ha hecho que las cosas fueran más sencillas desde el primer día. Como equipo, sabíamos cómo tendríamos que jugar para poder competir y, en especial, qué hacer para suplir nuestra falta de experiencia sobre la pista y, desde el primer momento, convencimos a los nuevos compañeros de que ese era el único camino para poder ganar partidos.

Tuvimos siempre claro que la única manera de ganar partidos era entrenar a todas horas y con esa filosofía hemos ido ganando tiempo al reloj de la temporada. Pocos equipos habrá, por no decir ninguno, que entrene más que nosotros y creo que ahí radica la clave del éxito. En muchas ocasiones se puede escuchar en el vestuario un "estoy cansado", "no tengo piernas” o un " no puedo más" pero sabemos que ese es nuestro camino y que, gracias a esto, estamos haciendo una temporada, que nadie esperaba.

Además del entrenamiento, todos nos llevamos muy bien, somos un grupo de la misma edad –salvo Javi y Carlos que son algo mas viejuno, pero de espíritu joven! Jaja-, con las mismas inquietudes e intereses comunes y que comparte sus ratos de tiempo libre y eso también se nota a la hora de jugar. Todos estamos a disposición del equipo y cada uno sabemos qué es lo que debemos dar para ayudar al conjunto. Tenemos mucha hambre, pero sabemos que la única forma de seguir mejorando y ganado partidos es estando juntos y mantenernos como equipo en los buenos y malos momentos”.


Trayectoria reciente - CB Peñas Huesca:

2004/05: Liga EBA (1º - Ascenso)
2005/09: Adecco Plata (5º, 16ª, 18ª y 11º)
2009/10: Adecco Plata (Copa Adecco Plata + Ascenso)
2010/11: Adecco Oro (15º - Permanencia)
2011/12: Adecco Oro (15º - Permanencia)
2012/13: Adecco Oro (8º - Playoff ascenso)
2013/14: Adecco Oro (7º - Jornada 18)