El próximo jueves se acaba el plazo de inscripción y el club necesita 100.000 euros para competir. Cuatro temporadas acarreando muchas dificultades económicas han terminado por tumbar al equipo. El club se dedicará a cuidar la trabajar la cantera

Al borde del abismo se encuentra el C.B Ciudad de Burgos. Tras tres años de competición en la máxima categoría del baloncesto femenino nacional, Liga Femenina, el equipo está viviendo sus últimos días. La próxima semana concluirá el plazo de inscripción y, a día de hoy, el club se quedará sin su primer equipo. Javier Ruíz, presidente del C.B Ciudad de Burgos está decepcionado. Diez años en el club y con los dos últimos como gran recuerdo, vive la frustración de que nadie quiera hacerse cargo del club. Las exigencias económicas le han superado. Confiesa haber pedido ayuda en diferentes ámbitos de la sociedad, sobretodo, a empresarios e instituciones, pero nadie se ha interesado por el equipo. La cuenta atrás ya ha comenzado y el baloncesto femenino, a buen seguro, saltará por los aires.

Diez años presidiendo el club y podemos estar asistiendo al final del baloncesto de élite en Burgos, ¿cuál es la situación a día de hoy del club?
La situación es que el club tienes unas necesidades económicas para competir en Liga Femenina de manera digna. Desde el 30 de mayo, día en el que me reuní con el vicealcalde, Ángel Ibáñez, no ha cambiado nada esta situación. Estamos igual, es decir, nadie de la ciudad ha preguntado por el club y su futuro.

¿Cuánto dinero le hace falta al club para competir?
Primero hay que poner el aval de 70.000 euros, cantidad en la que tiene potestad la Federación Española de Baloncesto un año, para posibles reclamaciones de jugadoras, entrenadoras. Teniendo en cuenta ésa cantidad, hacen falta 200.000 euros para competir dignamente. Se puede hacer con menos dinero, pero no está garantizado el nivel competitivo. Además, hay que tener en cuenta que nosotros tenemos que fichar a jugadoras foráneas, porque no tenemos la suerte de tener un mínimo de jugadoras de Burgos.

En las últimas temporadas, ¿se ha perdido el aval?
Efectivamente, las últimas cuatro temporadas yo he avalado al club con mi propio patrimonio para poder competir y las tres últimas temporadas lo han ejecutado, lógicamente. Además, cuando no se ha cubierto el presupuesto, he sido yo quien ha tenido que poner de mi dinero.

¿Cuánto dinero necesita el club para salvarse?
Entre 100.000 y 150.000 euros.

¿Cuál ha sido el presupuesto total del club las pasadas temporadas?
Ha rondado los 300.000 euros. Éste año hemos tenido un poco más de presupuesto por la inclusión de las categorías de base, con cinco equipos y una escuela que ha supuesto un 18% del presupuesto.

¿Javier Ruíz se siente sólo?
Si, desde hace mucho tiempo. No es una novedad para mi. He visto de todo en estos diez años, a la gente le gusta opinar y efectivamente la soledad es absoluta.

Ha sido objeto de intensas críticas, ¿se siente maltratado por los medios de comunicación?
Maltratado no, pero incomprendido si. Algún medio no ha entendido qué función he desarrollado. Hay cosas innegables, cosas que he hecho bien y se me han negado.

¿Cuáles son esas cosas bien hechas?
Es muy triste que después de diez años tenga que decir que el director deportivo del club soy yo, cuando es público y notorio, para lo bueno y para lo malo. Si una jugadora desconocida viene al club y lo hace bien, el éxito es de la jugadora o del entrenador y yo me pregunto, el director deportivo que es quien la trae, ¿qué pinta aquí?. Hasta eso se me ha negado.

¿Cuál ha sido la crítica que más le ha dolido?
Las que no están basadas en un conocimiento del baloncesto, es decir, me he encontrado con personas desconocedoras de baloncesto femenino.

Por otro lado, ¿cuáles son los errores más graves que ha cometido?
En diez años he vivido situaciones muy difíciles en soledad, pero los errores más graves han sido fundamentalmente dos, el fichaje de algún entrenador, y no me refiero a Esther Herrero. Tampoco he sabido tener una política de comunicación con los medios correcta. Ahí me he equivocado. Un presidente no puede ser tan accesible a los medios de comunicación. Esto ha sido un fallo garrafal.

¿Pero las dos últimas temporadas ha tenido jefe de prensa?
Si, lo hemos corregido bastante. Sergio González ha hecho un buen trabajo, filtrando la información del club. El hecho de que yo haya sido tan accesible, me ha perjudicado personalmente y no lo volvería a hacer nunca más. Entre los medios de comunicación y el presidente, debe haber una persona profesional que les atienda como se merecen.

¿Cuántos años lleva el club sin tener el pago de sus jugadoras al día?
Las dos últimas temporadas. Antes con mi aportación personal suplía estas carencias. Pero hace cuatro años, con la crisis, ha llegado el momento crítico del club. Yo sólo he hecho un parche. Si no hubiese puesto mi patrimonio al servicio del club, haría cuatro años que habría desaparecido.

¿Contaremos los medios el próximo 4 de julio el fatal desenlace?
La cosa está muy difícil, los días pasan y no ha llegado ninguna solución. Soy pesimista y creo que el equipo no participará la próxima temporada en Liga Femenina.

¿Dónde estará el club la próxima temporada?
Donde le corresponda. Hay que ir a la raíz del problema. No hemos hecho bien el trabajo de cantera en los últimos años. Porque no es admisible que muchos clubes de Liga Femenina tengan entre un 40 y 60% de jugadoras de la casa. Nosotros, sin embargo, no tenemos jugadoras para competir ni en Primera Nacional. Pero no es el momento de ponerse a lamentar. Han sido unos años y ahora nos toca cambiar, rectificar y trabajar en la raíz, en la cantera que es el futuro. Ni me planteo competir en Liga Femenina 2 porque estaríamos en la misma situación.

¿Se arrepiente Javier Ruíz de haber tomado el timón del club hace diez años?
En el ámbito personal sí, no hay día que no lo haga. Pero en el aspecto deportivo no. La gente que sabe de esto, sabe lo que hemos conseguido. Porque llegar a un sitio se puede llegar, pero mantenerse en la élite tantos años, no es nada fácil.

Culpa a algunos medios de no comprender su situación, pero ¿cree que han sido determinantes en el futuro del club?
Desde luego, ayudar no han ayudado. Por mucho que ellos piensen que sí, más bien todo lo contrario. Lo que más he sufrido es de pérdida de ilusión, sensación que me ha transmitido los últimos años algún medio de comunicación. Me ha hecho pensar que esto no merece la pena.

Si comparamos al Javier Ruíz de hace diez años con el de hoy, ¿qué diferencias encontramos?
En el plano profesional increíbles. Antes no sabía absolutamente nada de baloncesto femenino. Hoy, considero que la experiencia que tengo, a base de vivir muchas situaciones, me hace ser una persona formada, con un nivel muy alto de conocimiento en el baloncesto femenino. Además, en todos los sentidos, directivos, deportivos y administrativos. Me ha tocado hacer de todo.

¿De qué se siente más orgulloso en estos diez años?
De transformar el club. He sido testigo de la transformación del club esta década. Desde que cogí el club hasta hoy, ha cambiado todo, hasta el escudo y para mí ha sido un orgullo vivir esta transformación.

Cuando llegue el día 5 de julio y se conozca que el primer equipo no compite en la máxima categoría, ¿cómo se sentirá?
La verdad es que yo ya estoy pasándolo mal. No es que estos últimos días estén siendo especialmente duros para mi, no. Lo fueron cuando vi que los síntomas eran claramente negativos y que la posibilidad de mantener al equipo en Liga Femenina era muy complicado. Digamos que estoy viviendo los últimos momentos con un poco de ansiedad. Es como un enfermo que lo ha estado durante mucho tiempo. No es una cosa rápida e inesperada, la llevo viendo mucho tiempo.