A la selección española se le atragantó por momentos el disciplinado combinado nipón, pero terminó solventando el compromiso gracias a una dominante Astou Ndour, que firmó unos colosales 20 puntos y 17 rebotes. Reapareció siete meses después Laura Gil.

Segundo partido consecutivo para las de Lucas Mondelo, aunque con nueva convocatoria. Un partido especial en el que supondría la vuelta a la selección de la histórica Nuria Martínez, el retorno a las pistas de baloncesto de Laura Gil siete meses después de su rotura del ligamento cruzado anterior de la rodilla derecha, el debut con la selección absoluta de Leticia Romero, o un tremendo partidazo de la invitada Astou Ndour. Enfrente, una selección japonesa que será rival en la fase de grupos en la Copa del Mundo, de una insaciable capacidad de lucha, velocidad y disciplina como equipo elogiables.

En el inicio de partido, al igual que el día anterior contra Serbia, a España le costaba arrancar, y eran jugadoras con galones como Alba Torrens, Laia Palau o Marta Xargay quienes se encargaban de mantener el tipo. Por parte japonesa, pasaba un poco igual hasta la entrada en pista de su excelsa tiradora Mika Kurihara, que con dos triples consecutivos comandaría un parcial de 0-8 a favor de las asiáticas para sorprender a las españolas, que lograban cerrar el cuarto con igualdad en el marcador (17-17).

Aunque esté de invitada en la concentración, Astou Ndour quiere demostrar estar más que capacitada para aportar su presencia al equipo absoluto desde ya, y con los nervios y la timidez del debut echados hacia un lado, su intimidación en defensa y resolución ofensiva eran claves en el intento español por poner tierra de por medio (28-19, minuto 14), yéndose España al descanso con una significativa ventaja de nueve puntos a la que también contribuyó la eléctrica Anna Cruz en los compases finales de segundo cuarto (34-25).

Y en la reanudación, turno para otra joven que pisa fuerte en su primera experiencia con la selección. Leticia Romero, directora de orquesta desde el mismo comienzo del tercer cuarto, inauguraba el periodo con un triple y le daba al equipo español sus mejores minutos de juego en el partido, hasta alcanzar su ventaja máxima con un parcial de 13-3 que parecía dejar noqueadas a las niponas (47-28, minuto 24) y en el que Ndour seguía dando espectáculo con un triple y un posterior intento de mate que terminó repeliendo el aro. Nada más lejos de la realidad, Japón se mantenía fiel a sus señas de identidad y avisaba antes de pasar al desenlace (51-40, final del tercer cuarto).

Aunque Ndour estaba en su salsa, en el equipo de Tomohide Utsumi seguía sin acordarse cómo era eso de fallar Kurihara, y sin hacer mucho ruido Japón ya estaba ahí, alimentando el runrún del público (55-49, minuto 33). No todo estaba resuelto, pero Mondelo confiaría en estos momentos en algunas de sus jugadoras más jóvenes para sacar la situación adelante, y con Romero, Ndour y Queralt Casas juntas en pista la selección minimizaría a las japonesas con una defensa a toda cancha muy bien entrenada que permitió robar algunos balones clave. En los últimos instantes y desde el tiro libre, la diferencia llegó a ser de trece puntos, misma ventaja obtenida contra Serbia en la jornada del jueves (68-55).

España (68): Palau (2), Xargay (8), Torrens (8), Nicholls (6) y Ndour (20) –quinteto inicial- Lima (2), Martínez (0), Gil (2), Cruz (11), Casas (3) y Romero (6).

Japón (55): Oga (2), Mamiya (8), Takada (6), Miyamoto (2) y Tokashiki (12) –quinteto inicial- Oba, Yamamoto, Kudeken (0), Kurihara (17), Nagaoka (0), Miyazawa (6) y O (2).

Parciales: 17-17, 17-8 (34-25), 17-15 (51-40) y 17-15 (68-55).