El Granca logra vencer al Joventut tras dos derrotas previas esta temporada y consiguen recortar distancias en su lucha por entrar en el play off tras las derrotas de CAI y Valencia, sus rivales directos. Un partido en el que se repitió el mismo guión en numerosas ocasiones, con un Gran Canaria que se mantuvo siempre por delante y un Joventut que se encargaba continuamente de recortar las diferencias y llegar a un final a cara o cruz.

Fue mejor la puesta en escena de los locales, que venían de un largo desplazamiento después de su clasificación para las semifinales de la Eurocup. Con rápidas transiciones, buscando a Tavares y los triples de Salin (13-2 en tres minutos) lograban anotar con una enorme facilidad. Aíto presentó esta vez un quinteto con el finlandés Salin (no puede jugar la Eurocup) y O’leary y la defensa amarilla mostró una intensidad muy superior a la de partidos anteriores en ACB. Con 17-5 en el marcador y un Joventut desdibujado, Salva Maldonado pidió su primer tiempo muerto con poco más de cuatro minutos disputados y poco después en el quinteto del Granca solo permanecía Salin de los titulares. El Joventut reaccionó de forma rápida y efectiva, con cinco puntos de Savané y un triple de Vidal, recortaron las diferencias (17-13) y obligaron a Aíto a parar de nuevo el partido para frenar la mejora visitante. El Granca aprovechó el receso y los ajustes de su entrenador y, con dos triples de Urtasun y Kuric, volvieron a incrementar su ventaja (23-13). El equipo catalán consiguió frenar la anotación de su rival en los últimos minutos del cuarto y anotando de forma muy intermitente consiguieron llegar al final con una desventaja menor (25-18).

En el segundo parcial el Herbalife se mantenía con diferencias a su favor en torno a la decena de puntos, con intercambios equilibrados de errores y aciertos en ambos equipos. El Joventut obtuvo réditos positivos, durante estos minutos, del rebote ofensivo y con dos triples de Abalde y Hannah se acercaban a su rival (35-30). Los dos contendientes registraban grandes porcentajes de tiro (por encima del 50%) y más pérdidas de balón de lo habitual. Con una pequeña mejora del juego ofensivo de la Penya, el Gran Canaria había dejado escapar las rentas de las que había gozado en los minutos anteriores. Los badaloneses lograron llevar el choque hacia unos guarismos más igualados (41-37) a tres minutos para llegar al descanso. Un triple de Vidal mantuvo a los suyos a cinco puntos del Granca (47-42) antes de llegar al intermedio.

Otro gran partido de Vidal (8 puntos, sin fallo en los tiros y 3 asistencias) en el Gran Canaria Arena, después de la exhibición del catalán en la Copa del Rey en la que se enfrentaron los dos equipos protagonistas en el encuentro de hoy. También ochos puntos, sin fallo, de Hannah, que salió desde el banquillo y mejoró las prestaciones ofrecidas por su rival en el puesto de base, Mallet. En el Granca destacaba la gran facilidad anotadora del equipo, con seis jugadores superando los cinco puntos y once asistencias para dieciocho tiros anotados. Los dos conjuntos mostraron unos grandes porcentajes, sobre todo en los tiros de tres puntos (7 de 11 para el Granca y 7 de 10 el Joventut).

El Joventut recortó las distancias y con un triple de Abalde se ponían con una renta mínima (47-45), a un tiro de distancia y una desventaja menor que en ocasiones anteriores. Los locales reaccionaron con mucha energía, un incremento de la intensidad defensiva y con la anotación y la dirección de juego de Bellas (parcial de 8-0, 55-45). La tónica del partido continuaba igual desde el principio, con los locales poniendo tierra de por medio, pero con reacciones constantes de la Penya, dejando claro que iban a pelear el partido hasta el final. A pesar del mal día en el tiro exterior de Suton y de Mallet (1 de 7 en triples entre los dos), los jugadores que dirige Salva Maldonado encontraban respuestas continuamente, para volver a igualar el tanteo (57-54), ahora con Ventura como protagonista en la anotación. El tercer cuarto finalizó con empate a diecisiete (64-59) y todo por decidir en el último parcial. La anotación de los primeros veinte minutos se vio frenada, por la mejora defensiva de ambos equipos y el lógico empeoramiento de los porcentajes en los triples en los dos conjuntos (0 de 3 el Granca y 3 de 7 el Joventut en este tercer cuarto).

Siete puntos en un minuto y medio de Albert Oliver provocaban que el Granca volviera a aumentar las distancias (71-62). Este momento de inspiración del alocado base catalán fue un pequeño espejismo, ya que después vinieron momentos de continuos errores y las defensas dominando a los ataques. Más de tres minutos sin anotación hasta que Ventura, Báez y Abalde anotaran un triple cada uno (74-70, con tres minutos por jugar). El Granca completamente atascado, dando su peor versión, con tres puntos en seis minutos, se mantenía por delante (74-72) con un Joventut que anotaba de forma poco fluida, pero más efectiva que su rival. La inspiración de Llovet y los rebotes ofensivos de Tavares dejaban el marcador en 79 - 76 y veinticuatro segundos por jugar. Un robo de balón de Newley permitía un ataque del Granca, en el que el Joventut no hizo falta y Tavares falló un tiro cerca de canasta. Un tiro libre de Hannah dejó la victoria en Gran Canaria (79-77).

Gran partido de la dupla interior amarilla formada por Eulis Báez (14 puntos y 9 rebotes), que llevaba varios encuentros en baja forma y Tavares (17 puntos y 10 rebotes). Otro horrible partido (y ya van muchos) de Kendall, con constantes despistes en defensa que a veces camufla con su calidad en ataque. Cada vez juega menos y en muchas ocasiones pasa totalmente desapercibido también en el apartado ofensivo, donde tendría que marcar diferencias.

En la Penya, los mejores fueron Nacho Llovet, con una segunda parte espectacular, en la que anotó trece puntos, y los triples de Ventura y Abalde (7 de 8 entre los dos). Pelearon el partido hasta el final, con esfuerzos continuos para recortar las distancias obtenidas por el Granca en varias ocasiones.

Después del partido, los jugadores canarios volvieron a saltar a la cancha para que sus aficionados les recargaran de los ánimos necesarios para afrontar el histórico partido de semifinales de la Eurocup, que jugaran el miércoles en Kazán contra el Unics.