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Crónica ACB: Fuenlabrada vuelve a sonreír tras llevarse un final agónico (84-83)
Rubén Fuentes  | 13.01.2019 - 17:23h.
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El Montakit Fuenlabrada volvió a sonreír tras vencer a un rival directo por la permanencia como Obradoiro. Los del sur del Madrid dominaron el partido durante 39 minutos, pero los gallegos nunca perdieron la estela del rival y se pusieron por delante en los últimos segundos. Una canasta “in extremis” de Daniel Clark y una bandeja fallada por Kostas Vasileiadis en la última jugada dejaron la victoria en el Fernando Martín. De este modo, los locales ponen fin a una racha de 7 derrotas consecutivas que les habían colocado en puestos de descenso.


Tras varias jornadas perdiendo con rivales directos, Montakit Fuenlabrada hizo piña durante la semana para afrontar el partido como una final, algo que se vio desde el minuto 1 de partido. Pese a la intensidad, los primeros minutos tuvieron una gran fluidez anotadora. Las primeras ventajas fueron para los visitantes, liderados por Vladimir Brodziansky. 10 de los primeros 12 puntos de su equipo fueron suyos, haciendo mucho daño desde fuera con 2 triples (8-12 min. 4). Obradoiro parecía que viviendo del triple le era suficiente para comandar el marcador, pero la salida a pista de Maurice Kemp aportó un extra de intensidad a los fuenlabreños, que además afinaron la muñeca desde el triple para poner una renta solvente de por medio (25-16 min. 7).


Con Obst y Simmons en pista, los visitantes encontraron una vez más el acierto exterior, lo que les sirvió para igualar el partido (27-25 min. 10), pero un arreón de jugadores con pundonor como Llorca, Rupnik o Marc García devolvía cierta ventaja a los locales (37-30 min. 15) en un segundo cuarto donde las defensas se hicieron notar más. El Obradoiro no veía aro con la misma facilidad que en anteriores minutos, y sumaba poco a poco desde la personal. 4 puntos seguidos de un imparable Brodziansky volvían a igualar el marcador al filo del descanso (42-40 min. 19), pero un parcial final de 7-0 para Montakit Fuenlabrada volvía a poner tierra de por medio (49-40).


Tras la reanudación, un triple de Brodziansky era contestado al instante por otro de Dan Clark, lo que hacía prever que ambos equipos habían salido muy enchufados. Slava Kravtsov intentó buscar puntos en la pintura para intentar hacer daño a su par y mitigar el traje que seguía haciendo Brodziansky a los interiores fuenlabreños, pero fue la irrupción del capitán Marko Popovic la que puso a Fuenlabrada por encima de los 10 puntos con 2 triples consecutivos (64-53 min. 28). Vital la vuelta a las canchas del croata para liderar a su equipo.


Las ventajas locales llegaron hasta los 14 puntos (70-56 min. 29), lo que podía hacer prever un final placentero. Pero en esta Liga Endesa tan igualada, eso es muy raro de ver. En el último cuarto Obradoiro se agarraba el partido con los triples de Simmons y un Vasileiadis desaparecido hasta la fecha, además de unos excelentes registros desde el tiro libre (22/24 en el global del partido). Al Montakit Fuenlabrada parecía encogérsele la muñeca, además de no poder parar el asedio exterior rival, con curiosamente Álex Llorca sentado en el banco. Poco a poco la diferencia se diluyó cual azucarillo en leche, y a falta de 34 segundos 2 tiros libres de Nacho Llovet daban la victoria a los de Santiago (82-83).


Con todo el pabellón siendo un manojo de nervios, el balón le llegó a Dan Clark, que con buena posición de tiro, decidió no ejecutar desde el triple (quizás pensando en el tiro fallado ante Breogán hace 2 semanas) y entró con decisión a canasta dejando una bombita / bandeja en el último segundo que entraba y valía oro (84-83). Con 22 segundos por disputarse para los visitantes, la jugada llegó a manos del killer Kostas Vasileiadis que entró a canasta y marró la bandeja, de esas que él puede fallar 1 de cada 100 que lanza. Con 4 segundos, Brodziansky obtuvo el rebote en ataque y en una maraña de jugadores de ambos equipos se llevó el tapón de Dan Clark, que ahora sí daba por sentenciado el encuentro.



Victoria sufrida por Montakit Fuenlabrada que sobre todo, cambia las sensaciones que había alrededor del equipo y les devuelve la sonrisa gracias al juego coral donde todos aportaron. Partido que vale mucho más que un triunfo, por lo anímico, porque es frente a un rival directo, porque les saca del descenso y porque les hace depender de sí mismos para ir como anfitrión a la Copa del Rey, aunque seguramente este año este hecho sea más injusto que otros, vista la situación tanto de Estudiantes como de Fuenlabrada. Por su parte, Obradoiro vivió demasiado del triple y de Brodziansky, y seguramente perdió el encuentro dejando marchar a su rival en el tercer cuarto por 14 puntos. Pese a que pudo recuperar la ventaja “in extremis”, fue insuficiente para alzarse con el triunfo en un final a cara o cruz.


 



84 - Montakit Fuenlabrada (27+22+21+14): Bellas (6), Cruz (4), Llorca (7), Clark (11), Kravtsov (14) -quinteto inicial-, Kemp (8), Marc García (9), Popovic (10), Rupnik (11), González (2), Akognon (2) y O´Leary.


83 - Monbús Obradoiro (25+15+18+25): Sábat (6), Vasileiadis (12), Singler (7), Llovet (6), Brodziansky (24) -quinteto inicial-, Simons (14), Obst (8), Pozas, Hlinason, Spires (6) y Navarro,


Árbitros: Jiménez Trujillo, Aliaga y Martín Caballero. Sin eliminados.


Incidencias: partido de la decimosexta jornada de la fase regular de la Liga Endesa, disputado en el Pabellón Fernando Martín de Fuenlabrada (Madrid), ante 5.286 espectadores. En el descanso, alumnos del campus para niños “Baloncesto sin Rasgos”, apadrinados por el jugador del Montakit Fuenlabrada Chema González, dieron una auténtica exhibición.





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Noticia publicada por Rubén Fuentes

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