Tras unas semanas convulsas en cuanto a juego y resultados, Básquet Coruña afrontaba el duelo de esta noche, con necesidad de refrendar las buenas sensaciones transmitidas en el último choque frente a Burgos. Expectación también en la grada local por presenciar el retorno del pívot de Trinidad y Tobago Kyle Rowley, así como de evaluar la adaptación del escolta Justin Johnson. Enfrente un Cáceres con una buena racha de resultados, con los fantasmas espantados de los puestos de cola, y con poco que perder y mucho que ganar en esta recta final de la liga regular.

Como viene siendo habitual en muchos choques en el Palacio de Riazor esta temporada, el encuentro comenzó con un intercambio de canastas sin apenas fallos por ambas partes. Las defensas carecían de ajuste, y esto era aprovechado en especial por parte de Djuran y Olmos en el bando local, y por Rakocevic y Toledo en el lado visitante. Un elocuente 29-28 evidenciaba el desenfreno de los 10 primeros minutos.

Tito Díaz aprovechó el segundo cuarto para dar cancha a sus dos últimas incorporaciones, y ambos respondieron con creces. Justin Johnson anotaba con pasmosa facilidad, tanto a media distancia como en penetración, mientras Rowley imponía su presencia en ambas canastas. La consecuencia: Un parcial de 17-0 que permitía a los coruñeses poner tierra de por medio (47-30). Los locales maniataron el ataque cacereño, y encontraron la fluidez necesaria para imponer su supremacía. El panorama apenas cambió en los últimos minutos del primer tiempo, y los naranjas pudieron irse con una suculenta renta al descanso (56-39).

Si algo suelen tener los encuentros en A Coruña, es una permanente sensación de tensión, con emoción hasta la recta final. Básquet Coruña decidió ser fiel a las viejas costumbres, y encajó un parcial de 0-14 tras la vuelta de vestuarios, que permitió a los hombres de Bohigas reingresar de lleno en el partido (56-53). Era necesario que alguien diera un paso al frente, y ese resultó ser Zyle, que anotó tres canastas consecutivas, recuperando el pulso anotador de su equipo. Fuller y Marcius eran los encargados de dar buena réplica por parte extremeña. Tras la marejada, los coruñeses pudieron salir a flote manteniendo todavía una aceptable renta de 8 puntos de cara al decisivo último cuarto.

El último cuarto se inició con una jugada “de pillo” de Joan Creus, que tras el saque inicial del Cáceres, conseguía robar y asistir para que Justin Johnson anotara a placer. Cáceres seguía peleando por sus opciones de partido, con un juego eminentemente coral, pero lastrado por la escasez de su rotación, todo lo contrario de su rival, y es que Tito Díaz aplicó una rotación intensiva con hasta 11 hombres, lo que permitió mantener un alto nivel defensivo en los minutos finales, y así refrendar una victoria que los deja a las puertas de poder confirmar su clasificación para los play-offs. Cáceres por su parte, continúa navegando por aguas tranquilas de la clasificación.

LEYMA BÁSQUET CORUÑA (83): Zach Monaghan (5), Filip Djuran (10), Larry Abia (5), Javi Lucas (0), Sergio Olmos (13) -cinco inicial- Ángel Hernández (6), Justin Johnson (19), Gediminas Zyle (15), Kyle Rowley (4), Joan Creus (6), Tutty Sabonis (0).
Entrenador: Tito Díaz.

CÁCERES PATRIMONIO DE LA HUMANIDAD (69): Guillermo Corrales (2), Nikola Rakocevic (13), Sergio Pérez (8), Carlos Toledo (11), Aleksandar Marcius (12) –cinco inicial- Chris Fuller (19), Luis Parejo (0), Andrz Kavas (2), Zygimantas Riauka (2).
Entrenador: Ñete Bohigas.

Parciales: (29-28), (27-11), (10-19), (17-11).

Árbitros: Juan Carpallo Miguélez, Francisco José Zafra Guerra. Sin eliminados

Incidencias: Partido de la vigésimo sexta jornada de la fase regular de la Leb Oro, disputado en el Palacio de Deportes de A Coruña ante unos 1.600 espectadores. Viernes 3 de Marzo de 2017 a las 21 horas.