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La Esquina de Sunara: El déjà vu, por Iván Fernández
Iván Fernández  | 08.09.2019 - 19:47h.
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Lo del déjà vu con esta selección, Scariolo o incluso Claver (2013 y 2015 al menos) no deja de ser una cosa la mar de divertida... aunque supongo que a la mínima habrá que volver a aguantar las criticas ventajistas de siempre.

La verdad es que hoy no lo esperaba. No por falta de capacidad, ya que sigo viendo a Serbia incómoda en las configuraciones grandes y falta de efectivos por fuera, sino porque pensé que era pronto, que aún no era el día clave para que España pusiese las cartas encima de la mesa...


Sinceramente, no pensaba que fueran a salir hoy al 100%. No lo pensaba porque el equipo este año es más corto y venía de una paliza física ante Italia. También porque, siendo mejor Argentina, tampoco hay tanta diferencia con un cruce con Polonia (aunque hoy los del ´Oveja´ hayan machacado). ¿Evitar a USA en semifinales? Sí, eso es un plus... pero ojo, porque si juegas una semifinal frente a los de Popovich te aseguraba que aunque perdieses podías pujar en el bronce por los Juegos, y de esta manera te arriesgas a que Serbia les pueda vencer en semifinales y la cosa se complique...



Pero España ha salido a tope y el primer tiempo ha sido impecable. Lo de Rudy y Claver es una cosa de locos... por no hablar del planteamiento táctico de Scariolo. Fue varios años entrenador de Djordjevic en la Effe y en el Madrid, y hoy le ha dado un baño tremendo. Nada sorprendente, porque este Scariolo -a nivel de selección- es uno de los más grandes de la historia FIBA.


Djordjevic es muy buen seleccionador porque es listo, intuitivo y porque con su ascendencia de su etapa como jugador controla muy bien al grupo. Las purgas de años anteriores a los Micov o Marjanovic, oa los Kalinic y Nedovic de este año le sirven de cara a dentro... Pero frente a eso es un entrenador horrible. A nivel de club se la ha pegado en Milán, Treviso, Atenas y Berlín. A Bolonia llegó, se llevó la Champions en efecto revulsivo... pero con el paso de las semanas la Virtus quedó fuera hasta de los play-off.


Con la selección todo son éxitos, heroicos como en 2017 por las bajas (aunque este equipo al final ha acabado pareciéndose a aquel más de lo deseable) o calculadores como los del Mundial 2014 y los Juegos de Rio 2016: 2-3 en ambas primeras fases, para acabar como motos en los cruces y entregados en la final. La excepción fue 2015, con el mejor equipo hasta el de este año: un primer grupo exigente que solventaron brillantemente, hasta que en semifinales una muy inferior Lituania les colapsó con Djordjevic totalmente paralizado...


Por suerte para ellos, esta vez les pasa muy pronto y van a tener más margen. Es un crimen tener al mejor pívot del mundo como 4 y un Nemanja Bjelica que es un lujo sacrificado con minutos como 3. Pero ojo, que no todo es culpa de Djordjevic, ni acierto de Scariolo. La baja de Teodosic cada día es más importante. Jovic aprieta atrás, dirige correctamente... pero es horrible de fuera. Y Micic y Guduric han estado totalmente fuera, justo tras la mejor temporada de sus vidas pero sin que les den confianza. Si no resucitan la dependencia de Bogdanovic corre peligro de ser peor que en 2017.



Como decíamos, evitar a USA en semifinales es goloso, pero también que con el reparto de plazas para los Juegos Olímpicos eso le daba un comodín. De hecho, estadísticamente hablando, es más fácil ganar a los americanos en semifinales que en la final. Desde 1982 USA no pierde una final o un partido por el bronce, y curiosamente desde que es independiente Serbia lleva un 0-6 en esos mismos partidos decisivos...


Desde el lado serbio lo mejor es que esto les puede despertar: hay indicios de cierta mejora de Micic y en un hipotético enfrentamiento de nuevo con España tendría esa pequeña ventaja ya de haber perdido. Pero para España ésto cambia el torneo claramente, y lo cambia sobre todo desde fuera. Por dentro no tengo dudas de que confiaban en sus posibilidades, pero por fuera esto les va a señalar como candidatos y ahora incluso ya puede hasta parecer poco llega a semifinales...


En 2015, por cierto, España lo pasó horrible ante Polonia muchos minutos en el cruce y lo acabó sacando adelante gracias al acierto en el triple de Pau Gasol ante Gortat...





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