Otro gran partido de los Akatsuki en el Okinawa Arena, que será sede del Mundial 2023.

Japón se enfrentó cara a cara con Kazajstán en la primera mitad antes de aumentar su intensidad defensiva para separarse en el marcador en los últimos 20 minutos y llevarse la victoria por 73-48.

La primera mitad terminó con empate a 27-27, pero los Akatsuki salieron del vestuario tras la pausa con la defensa como su principal prioridad. Dejarían a los Steppen Wolves en solo 10 puntos en el tercer cuarto y sumarían ellos 46 en la segunda mitad.

Todos los jugadores excepto Yuya Nagayoshi anotaron para Japón, con Yudai Nishida (13 puntos) y Yudai Baba (11 puntos) en dos dígitos. Por su parte, Nick Fazekas se mantiene invicto en la clasificación y firmó 8 puntos y 8 rebotes en su regreso a la selección. Para Kazakhstán, Anton Bykov fue el mejor con 18 puntos y 8 rebotes.

Los entrenadores siempre enfatizan la importancia de salir fuerte tras el descanso, y Japón lo hizo muy bien en este partido, con un parcial de 12-0 en solo 3 minutos al comienzo del tercer cuarto del que Kazajstán ya no pudo recuperarse.

La mayoría de los exteriores japoneses impusieron su ley, pero fue Yuki Kawamura quien llevó las riendas de su equipo en el lado defensivo. A pesar de ser uno de los jugadores más pequeños en la cancha, el joven Kawamura sigue siendo un revulsivo para Japón debido a su intensidad defensiva, muy contagiosa entre sus compañeros. Sus 5 robos dicen mucho, pero es solo una parte de lo que el jugador de 21 años tiene para ofrecer.

Japón dejó a Kazajstán en solo un 28,6% en tiros de campo (20/70) y un 7,7% en triples (2/26), forzando además 24 pérdidas de balón.