Pocas horas después de que la Associated Press y ESPN/USA Today le colocaran en lo más alto de sus respectivos rankings como consecuencia de la pasada derrota de Ohio State en el Kohl Center de Wisconsin, Kansas Jayhawks sufría una humillante derrota en su visita al Fred Bramlage Coliseum de Manhattan para caer derrotados en el ‘derby’ estatal por los Wildcats de Kansas State (68-84). Los chicos de Bill Self fueron incapaces de detener las internadas del base local, Jacob Pullen, que realizó su mejor partido esta temporada al finalizar con 38 puntos y 5 asistencias.

Esta victoria les sirve a los de Frank Martin para tomar un poco de aire después de la complicada temporada que los Wildcats están teniendo, tanto en cuanto a resultados -han perdido un total de 9 partidos y solo han ganado 5 de sus 11 enfrentamientos de conferencia- como en cuanto a cuestiones extradeportivas, ya que hace un mes fueron castigados por la propia universidad dos de sus principales jugadores -Curtis Kelly y el propio Jacob Pullen- por robar ropa de unos grandes almacenes.

Los Jayhawks sufrieron desde los primeros minutos del encuentro con la férrea defensa de los de Frank Martin, neutralizando rápidamente la superioridad en la pintura que alcanzan habitualmente con los hermanos Markieff y Marcus Morris, sacándolos pronto del encuentro a base de faltas personales. Pullen enseguida cogió el mando del partido y comenzó a establecer las primeras diferencias claras en el marcador, llegando a alcanzar los once de ventaja y finalizando la primera mitad con nueve arriba.
Ya con los Morris nuevamente en cancha, Kansas no lograba acercarse en el marcador debido a las pérdidas de balón y a la mala fortuna de cara al aro rival, todo lo contrario que los Wildcats, que encontraban tiros cómodos y de manos de Pullen y Rodney McGruder comenzaban a expandir la diferencia en el marcador hasta los 18 puntos a falta de 10 minutos para el final, con un triple de Pullen (47-65) pero a pesar de la insistencia de los Jayhawks, éstos no cedieron, conformando una de las grandes sorpresas de toda la temporada.
El base Tyrel Reed fue el máximo anotador de los visitantes con 14 puntos, 4 asistencias y 3 robos.

En el otro encuentro destacado de la jornada, Syracuse Oranges volvió a la senda de la victoria después de lograr una importante victoria en el Carrier Dome ante West Virginia Mountaineers (63-52). Los de Jim Boeheim no terminan de encontrar esta estabilidad en cuanto a resultados que tuvieron a inicios de temporada, alternando buenas victorias con sonrojantes derrotas en la Big East. Ante los Mountaineers, y yendo a contracorriente en gran parte del encuentro, no desplegaron un juego especialmente vistoso pero sacaron adelante un encuentro que les sirve para recuperar parte de la moral perdida en sus anteriores derrotas ante las universidades de Georgetown y Louisville.

Los triples del reserva Casey Mitchell (23 puntos) hicieron mucho daño a los locales tanto paa expandir diferencias en la primera parte como para acercar a los Mountaineers en el marcador cuando éstos mandaban en el luminoso. Al final, los aleros C.J. Fair (8 puntos, 5 rebotes) y Kris Joseph (16 puntos, 5 rebotes) cogieron la manija anotadora del equipo en los minutos finales y cerraron el partido para sumar la 21ª victoria de los Oranges de la temporada.

El base Brandon Triche fue el máximo anotador de los locales con 20 puntos.