La multitud estaba tan entusiasmada con Jones que grabaron en video todos sus movimientos desde la grada.

Cuando se trata de grandes debuts, el de Kai Jones de Bahamas está en lo más alto de la lista. Jones, que no empezó a jugar al baloncesto hasta los 15 años, es ahora el joven talento más llamativo de la fase de clasificación de las Américas para el Mundial 2023, con un primer partido increíble con su selección nacional.

Las islas del archipiélago de Lucayan, en las Indias Occidentales, sin duda temblaban cuando el pívot de Charlotte Hornets, de 2,08 m, y Greensboro Swarm mostraba su enorme potencial. Fue el mejor jugador en la cancha en la derrota de Bahamas por 86-81 ante Venezuela.

No hay nada que le guste más a un entrenador que tener una última línea de defensa con un jugador como Jones. El pívot puso tres tapones, lo que hizo que la vinotinto se lo pensara dos veces antes de intentar anotar por dentro. Jones también mostró una gran anticipación robando un balón, y a pesar de ser un gran artista del mate hizo mucho más contra Venezuela. Conectó un triple con el reloj de posesión a punto de agotarse, anotó una difícil bandeja y también atacó el aro de Venezuela.

Desde luego lo que mejor sabe hacer Jones es elevarse y lanzar, algo que también hizo en varias ocasiones. Solo necesitó 15 segundos para conseguir su primer mate a dos manos, que marcó el tono y que mandó a una multitud ya emocionada al éxtasis. Jones atrapó un alley-oop y machacó, y estuvo eléctrico en el contraataque, corriendo adelante para atrapar un globo y machacar el aro.