La victoria permite a Costa de Marfil seguir invicta en la fase de clasificación.

El tercer encuentro entre Costa de Marfil y Nigeria en la historia de los clasificatorios africanos para la Copa del Mundo ​​demostró valer la pena en todos los sentidos, con cada equipo mostrando su mejor determinación para ganar.

Sin embargo, la fuerza de voluntad se demostró más por parte de los Elefantes de Costa de Marfil, que tuvieron a la afición local animando sin cesar y no defraudaron al llevarse la victoria por 78-66 sobre la escuadra nigeriana.

El partido estuvo lleno de alternancias, con Costa de Marfil tomando el control desde el primer cuarto y Nigeria defendiéndose con los triples de Chimezie Metu. Con el marcador empatado 46-46 a 4:39 minutos del final del tercer cuarto, los costamarfileños estiraron la ventaja para cerrarlo 60-52.

Souleyman Diabate fue sin duda el jugador más decisivo para Costa de Marfil, aportando su experiencia a sus compañeros de equipo. Su impacto fue increíble, estando en todas partes, desde la defensa hasta el ataque con sus dribblings, que obligaron a Nigeria a frenarle con faltas, anotando 10 puntos en el partido. El jugador, de 35 años, estuvo en la cancha durante 25:44 minutos, pero su impacto se hizo sentir con la energía que aportó a su equipo.

En un partido muy esperado, Costa de Marfil fue el equipo más agresivo anotando 31/66 frente a 21/65 de Nigeria, mientras que en rebotes los marfileños fueron los mejores con 43 frente a 39. Nigeria registró 21 pérdidas de balón frente a 19 del equipo local y robó 13 balones frente a 11.

Costa de Marfil ha ganado sus siete partidos en la clasificación para la Copa del Mundo, con una racha de 12 en las eliminatorias, y ahora afrontará con esperanza sus dos próximas citas.