El alero, que creció en la otra parte del mundo, afirma que siempre soñó con jugar para Lituania en este nivel.

Ignas Brazdeikis ha cumplido finalmente la oportunidad de cumplir su sueño de vestir la camiseta de Lituania en las recientes ventanas de clasificación para la Copa del Mundo 2023, y ya piensa en el próximo EuroBasket 2022.

Este verano supone un nuevo comienzo para el jugador de 23 años, ya que un año después de volver a conseguir la nacionalidad Lituania el nacido en Kaunas jugará con su selección natal. Su familia emigró y se estableció en Canadá, pero Brazdeikis siempre ha sentido orgullo de su origen, donde vive la mayoría de su familia, y declara sentirse “completamente lituano”.

"A pesar de que crecí y jugué al baloncesto en Canadá, siempre he querido jugar para Lituania”, afirmó. "De pequeño veía los partidos de la selección con mi familia y amigos, veíamos todas las grandes competiciones”.

Lituania está encuadrada en el Grupo B del EuroBasket, que se disputará en Colonia. Un país de menos de tres millones de habitantes quiere volver a la primera línea internacional, que no pisa desde que fue finalista en el EuroBasket 2015.

Brazdeikis está seguro de que el equipo tiene la capacidad de conseguir la octava medalla de la historia para Lituania en un EuroBasket.

"Queremos hacer gran ruido en este EuroBasket. Siento que somos uno de los equipos tapados, tenemos la capacidad, los jugadores, el talento y los entrenadores perfectos para vencer”.

El verano pasado, los 11.562 asistentes al Zalgirio Arena se quedaron atónitos cuando Lituania caía ante Eslovenia en la final del Preolímpico de Kaunas gracias a un milagroso triple doble de Luka Doncic. Ahora el enfrentamiento se repetirá el 1 de septiembre en el EuroBasket.

"Estoy muy emocionado de jugar contra Eslovenia. Será la primera vez que juegue en un gran escenario en competiciones FIBA. Nunca he huido de esos partidos, y todos estaremos listos, porque perder contra ellos la última vez nos dejó un sabor amargo".

Los oponentes de Lituania tendrán mucho trabajo por delante cuando entren en la pintura contra “las Torres Gemelas”, como los llama Brazdeikis: Domantas Sabonis y Jonas Valanciunas. Los grandes nombres del resto de equipos agregan emoción a la cita para Brazdeikis: "va a hacer que sea mucho más divertido. Todos estamos muy emocionados por competir y hacerlo lo mejor posible. Eso es lo que queremos".

Sin embargo, Brazdeikis no es un extraño en las competiciones FIBA, ya que disputó con Canadá el Mundial U17 de 2016, promediando 14.7 puntos por partido y alcanzando el quinto lugar.

El alero llegó a Lituania en junio, cuando el equipo se preparaba para cerrar su participación en el Grupo F de la fase de clasificación para la Copa del Mundo 2023. El ex-jugador de Michigan, que pasó las tres primeras temporadas de su carrera profesional entre la NBA y la G-League, admite que tendrá que hacer una transición en el cambio de juego de Estados Unidos a Europa.

"El ritmo del juego es un poco diferente. Según lo que he visto, es muy estratégico y de mentalidad defensiva. Todos juegan duro en defensa y tienes que estar preparado para cada partido", apunta Brazdeikis.

Sin embargo, no parece que le haya molestado ese ritmo, promediando 14,5 puntos por partido como máximo anotador de Lituania en los partidos frente a Bulgaria y República Checa. Además, anotó quizá los dos puntos más importantes en Bulgaria con un mate que puso a Lituania 2 arriba a 1:30 del final.

"Ganar ese primer partido contra Bulgaria fue un momento especial para mí. Me encantó cada segundo del encuentro, fue un partido duro en un ambiente muy intenso", declaró sobre su debut. "Todavía me queda mucho por descubrir, pero lo estoy tomando día a día y simplemente disfruto cada momento".