Como titularía el incisivo crítico cinematográfico Carlos Boyero: Jornada de "Pocas perlas y mucho tedio". No puedo ocultar que, en días de competición como este último de la segunda fase, hay mucho más de obligación que de goce ó disfrute personal en el hecho de permanecer frente a la pantalla del portátil ó la TV, según corresponda, visionando los 'actos' programados por la organización del Eurobasket 2011. Y es que pocos elementos ilusionantes podían rescatarse de la sinopsis de la sesión:

Finlandia se perfilaba como una víctima propiciatoria para Eslovenia y ha seguido el guión a la perfección, víctima de su bisoñez internacional, desaprovechando las innumerables oportunidades que los eslovenos les brindaban para estrechar el tanteador y protagonizar un thriller.

Grecia y Georgia afrontaban un choque insustancial en el que, con independencia de lo que reflejase el marcador final, no habría vencedores ni vencidos... Afortunadamente para el espectador, ha surgido la destacada interpretación de Kostas Vasileiadis, un pistolero duro y con carisma, amante del western sobreactuado y los tiroteos a lo OK Corral, para disparar 7 veces, anotar 15 puntos en 19 minutos y hacer que toda la trama e historia a contar fuesen un poquito menos grises y molestas.

Y lo más destacado de este episodio final, totalmente rutinario y prescindible como ya se preveía, ha llegado con el suspense generado en los minutos previos al instante en que se desvelaría el secreto del vencedor del Rusia - Macedonia y, por tanto, conocer al primer clasificado del Grupo. Lástima que la rudimentaria y más que afortunada ejecución de Sergey Monya, en el decisivo triple ganador sobre la bocina (que me ha traído, dicho sea de paso, recuerdos 'sevillanos' protagonizados por el croata Marko Tomas), pues haya resultado menos genial y mucho más deslucida de lo que uno se había imaginado.

Rusia ha disputado el peor partido de la 2ª fase y Andrei Kirilenko el peor en todo el campeonato, con sólo 1 canasta convertida en 9 intentos. AK47 ha estado fuera de plano, muy impreciso y demasiado distraído; alejado del discurso de "entregarlo todo en la cancha" que él mismo propugnaba hace un par jornadas.
A pesar de este retroceso, los rusos alcanzan los cuartos de final con buen ánimo y una valoración notable que no está nada mal, pero que deberán subir a sobresaliente si pretenden alcanzar la gran final. La selección de Serbia constituirá un primer examen durísimo.

Macedonia ha conseguido mantener el partido bajo control merced a las aportaciones de Bo McCalebb (16 ptos) y de su "Carlos Boozer" particular, Pero Antic, quién se muestra menos indolente que nunca y aporta en múltiples facetas. Hoy ha firmado su tercer doble-doble del torneo (15 pts + 10 reb), al que añadido 5 buenas asistencias.

Lo mejor de toda mala película llega, sin duda, con la imagen fundiendo a negro, los títulos de crédito pasando y la música sonando. Fin a la segunda fase en un grupo F con unos efectos especiales de segunda categoría. Hora de levantarse de las butacas del Siemens Arena de Vilnius, hacer las maletas y dirigirse al flamante nuevo Zalgirio Arena de Kaunas, un escenario excepcional en el que deseamos ser espectadores de excepcionales encuentros de baloncesto, de atmósferas mucho más vibrantes, que sugestionen una creatividad latente pero que ha permanecido inhibida o bloqueada hasta el momento.