- Volcanes en erupción: Un magnífico espectáculo de la naturaleza, a miles de grados de temperatura.

Los expertos ya habían advertido, con sobrada anticipación, de la elevadísima actividad volcánica registrada en los últimos días, en toda la zona del Mar Báltico. La monitorización y seguimiento se habían centrado en dos placas tectónicas concretas: Una, la Española, muy estudiada y de tamaño continental. La otra, la Macedonia, poco conocida y de menor superficie que la primera.
Los sismógrafos habían ofrecido señales inequívocas de que se aproximaban nuevos estallidos y erupciones de los volvanes McCalebb y Navarro. Las avalanchas de juego, el aumento de la temperatura, los sismos previos y los frecuentes resplandores rojizos de ambos, aconsejaban extremar las precauciones y buscar zonas de seguridad. El inminente choque de las dos placas requería, sin duda, elevar el nivel de alerta al máximo: del amarillo al rojo, con paso previo por el naranja.

Y las predicciones acertaron. McCalebb confirmó que es una terrible amenaza para el espacio aéreo de cualquier país. Nunca un volcán de tan reducidas dimensiones había sembrado el caos de este modo. Hoy elevó una nube volcánica de inmenso poder, que monopolizó el tráfico en las cercanías del aro y arruinó la totalidad de intentos de sobrevolarle. Devastador.
La actividad y características del volcán Navarro son bien distintas, pero igualmente rotundas. Desde hace más de 10 años documentamos su furia y los estragos que causa con el lanzamiento, a grandes distancias, de proyectiles volcánicos y bombas de lava incandescentes seguidas de imparables coladas de lava a alta temperatura, precipitándose montaña abajo y arrasando cuanto objeto sale a su paso. Si Navarro entra en erupción, no hay lugar a réplica... Hoy ha sucedido por 3ª ocasión consecutiva y ha colocado su racha en unos niveles inalcanzables: 77 puntos, 77 bombas volcánicas, en los últimos 77 minutos de juego.

Bo McCalebb (25 puntos + 5 asistencias) y Juan Carlos Navarro (35 puntos, con 5/9 T3p), son dos estilos de un mismo maravilloso deporte.


- Nicolas Batum sigue en combustión. La temperatura de ignición del motor francés siempre se alcanza con la dirección y la chispa de Tony Parker. Es entonces cuando Batum entra en contacto con el oxígeno del Kaunas Arena y provoca una reacción química para que todo arda espontáneamente. Lanzamientos triples, mates estratosféricos y jugadas rebosantes de calidad, hasta completar una inmejorable hoja de servicios: 19 puntos, 7 rebotes, 4 asistencias y 2 tapones. La España de Sergio Scariolo tendrá que buscar agentes que sofoquen esta combustión, para despejar el camino hacia el Oro.




- A estas alturas de torneo, lo único que me hiela el aliento es divisar el pronto final de la emoción del Eurobasket 2011 y, con ello, la obligada pausa competitiva a nivel de selecciones. Se me hiela el aliento porque esa pausa será, más pronto que tarde, una pausa definitiva. Llegará el temido punto y final de nuestra rutilante (y casi irrepetible) generación de estrellas, que han convertido a España en una potencia del baloncesto internacional de los últimos años. Si pudiera pedir un deseo, ese sería el de poder congelar el tiempo y vivir estos instantes de forma infinita.