El binomio canario del CAI Zaragoza |
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Dos de los fichajes del CAI Zaragoza para afrontar su temporada en la ACB tiene en común tanto su club de origen como la forma de llegar al equipo aragonés. Tanto Roberto Guerra como Sergio Pérez proceden del Kalise Gran Canaria, en el que han compartido vestuario con Mario Fernández, uno de los jugadores más queridos y que más huella dejara en la afición zaragozana, y han llegado después de que el club canario decidiera no igualar la oferta que había realizado el CAI tras haberlos inscrito en el famoso derecho de tanteo.
Aunque pudiera parecer sorprendente su salida, puesto que se trata de dos de los muy cotizados seleccionables, todo parece deberse a la difícil coyuntura económica por la que atraviesa el club, si bien en el caso de Guerra existen otra serie de causas que explican su marcha.
Roberto Guerra (25 años) es un poderoso escolta que puede jugar de alero surgido de la cantera del Gran Canaria que ha visto disminuir sus porcentajes y participación en el equipo desde la llegada de Salva Maldonado a los banquillos. Ha pasado de ser el icono y referente mediático a no jugar prácticamente nada, con una presencia testimonial en los encuentros, lejos de aquella capacidad de levantar a la grada y revolucionar al equipo que tantas veces demostrara.
Las malas relaciones con su entrenador han posibilitado que Guerra abandone por primera vez en su carrera las islas para incorporarse a un proyecto ilusionante como es el que representa el CAI. Durante este verano, ha viajado a Estados Unidos para perfeccionar su tiro, quizá la faceta de juego en la que menos destaque este especialista defensivo dotado de una gran habilidad y potencia en las entradas a canasta. Su fichaje sólo genera dudas en cuanto a la capacidad de adaptación a un nuevo equipo, a una nueva afición lejos de la que le ha visto forjarse.
Sergio Pérez es un alero madrileño de 28 años cuya carrera profesional ha discurrido por varios equipos desde que comenzara en el Estudiantes. Es un viejo conocido de la afición maña, por cuanto disputó el play off de ascenso en la temporada 2005-2006 defendiendo los colores del Polaris World Murcia demostrando una de sus virtudes: el tiro de tres, y con la anécdota, que siempre se identifica con su nombre en el Príncipe Felipe, de una polémica falta en ataque pitada al capitán caísta Matías Lescano que podía haber variado el signo del encuentro.
Perseguido por el tópico del alero alto buen tirador pero con aversión al juego físico, durante la pasada temporada tuvo el mejor porcentaje de triples en la ACB (49%), en la que disputó un promedio de 14 minutos por encuentro, anotó 6.2 puntos y capturó 1.3 rebotes de media. Con estas credenciales, su salida del club canario sólo se puede explicar por problemas financieros.
En definitiva, el CAI dispone de un efectivo binomio de jugadores procedentes del equipo canario que cumplen tanto la condición tan anhelada de seleccionables como, y esto no deja de ser más importante, la virtualidad de conformar con sus compañeros un perímetro bastante completo, en el que conviven tiradores letales (Quinteros y Sergio Pérez) con grandes e intensos defensores (Guerra o Lescano), con el aderezo de que ambos aportan un importante grado de experiencia en una liga tan competitiva como la ACB.